viernes, 25 de noviembre de 2016

Disertación Unidad 2



Disertación filosófica Unidad 2

En esta entrada voy a reflexionar acerca del sentido que tiene vivir a pesar de que todos morimos.





La muerte es una realidad hacia la que todos caminamos... ¿Qué sentido tiene la vida entonces, dado que todos vamos a morir algún día?  

La vida comienza al nacer y termina al morir ¿Por qué morimos? ¿Para qué nacemos si vamos a morir? ¿Qué sentido tiene vivir para luego dejar de hacerlo? Todas las personas nacemos y morimos, todos vamos a fallecer en algún momento ya sea de jóvenes o de viejos. Esa es la verdad, es inevitable e ineludible, es nuestro futuro y hay que aceptarlo ¿Qué tenemos que pensar durante nuestra existencia si vamos a acabar todos de la mima forma? ¿Debemos temer a la muerte? ¿Hay que sentirse mal por saber nuestro destino o aprovechar todo lo que nos ocurre? ¿Olvidaremos todo cuando esto ocurra? En la Real Academia Española nos definen la muerte de dos formas diferentes: Cesación o término de la vida. En el pensamiento tradicional, separación del cuerpo y el alma. Ambas se asemejan al significado de la palabra que estoy analizando y al sentido que le quiero dar. Asimismo, define la vida como: Tiempo que transcurre desde el nacimiento de un ser hasta su muerte o hasta el presente. En la disertación filosófica voy a responder a aquellas preguntas que tengan respuesta y voy a tratar de darle sentido a la palabra "muerte" y a la palabra "vida". Voy a decir por qué hay que vivir disfrutando de todas las experiencias y situaciones de la vida.

A continuación, comenzaré explicando la razón de morir, como todos sabemos, nacemos y morimos, es la realidad y por tanto hay que afrontarla. Al morir, las personas de tu alrededor sufren, todos aquellos que te han querido te recuerdan y se entristecen, recuerdan momentos bonitos contigo pero se ponen tristes porque saben que ya no podrán repetirlos. Existen dos tipos de personas en la sociedad: Los más creyentes, piensan que las personas que se marchan al lado de Dios, pasan a vivir una vida más plena, sin dolor y sin preocupaciones y que se reunirán con sus seres queridos en un futuro. Son todos aquellos que creen en un ser superior para sentirse seguros y conseguir explicaciones que les satisfagan acerca de la muerte y del por qué morimos. Necesitan creer que hay algo después, que seguiremos existiendo. Piensan que la vida terrenal es un tránsito para alcanzar la vida espiritual junto a Dios. Existen otro tipo de personas que no creen en ningún ser divino y que intentan dar explicaciones lógicas a la vida y a la muerte. Algunas de ellas viven frustradas sin encontrar explicaciones racionales a estas preguntas. Sin embargo otras, son capaces de dar explicaciones racionales a muchas preguntas que les valen para vivir basándose en teorías filosóficas como las de Sócrates, Platón o Aristóteles. Por tanto, creyendo en Dios o no, se puede vivir de una forma pacífica y encontrando respuestas satisfactorias a estas cuestiones. Todos los que se van de este mundo no lo hacen completamente ya que continúan en los recuerdos de las persona que siguen vivas, en sus pensamientos. No mueres hasta que no desapareces de los recuerdos de la gente. No falleces del todo hasta que no te olvidan. A pesar de la muerte, nos han dado la vida, es un regalo, y hay que aprovechar al máximos cada momento, cada sensación, cada minuto. No hay que pasarse la vida pensando en el final, temiéndolo o tristes porque en algún momento no estaremos, hay que vivir y disfrutar de nuestro alrededor, hay que involucrarse con la gente que nos rodea para que en un futuro, cuando ya no estemos aquí, nos recuerden y no muramos del todo. Cuando nos vayamos al otro lado debemos sentirnos satisfechos de nuestras anécdotas, vivencias y de las personas que nos han rodeado y sólo en ese momento podrás ir en paz y no arrepentirte de nada. Asimismo, existen dos filósofos que nos ofrecen sus reflexiones acerca de la muerte: San Agustín, dice que todo es creación de Dios, el alma es inmortal y el cuerpo no debe ser la cárcel de esta, solo debe ser el medio para realizar sus acciones. Con esta reflexión, se afirma que el alma al ser inmortal y morir en la tierra, sigue viviendo junto a Dios en el cielo, por tanto nace y nunca llega a dejar de existir, desde mi punto de vista, como soy creyente, pienso igual que San Agustín, creo que nacemos y al morir vamos junto a Dios, por lo que lo único que hacemos es dejar la Tierra, seguimos viviendo pero en otro lugar. Este filósofo era discípulo de Platón, el cual no era creyente pero daba respuesta a las preguntas afirmando que existía un dualismo ontológico, es decir que el alma es lo más importante y que esta, está protegida por el cuerpo, este es su cárcel. Al morir la parte material del Ser humano, muere a su vez el alma. Santo Tomás, dijo que la forma del hombre es su alma y no puede existir con independencia del cuerpo. Sigue la teoría de Aristóteles de la unidad sustancial de cuerpo y alma. Este filósofo no era dualista, pensaba que el alma no puede vivir sin el cuerpo. Asimismo, enseñó que sólo se puede alcanzar la felicidad si estás junto a Dios.

Por último y para concluir, voy a escribir mis pensamientos acerca de este tema y mi opinión. Desde un punto de vista imparcial, sin casos cercanos, la muerte es aceptada, lejana, simplemente no piensas en ella. Una persona no sabe a qué se enfrenta hasta que un caso se cruza frente a esta. Hasta que alguien querido o conocido no muere, no realizas que la muerte está ahí, que existe y que en algún momento te llegará a ti o a tus personas queridas. Generalmente, antes de enfrentarse a este tipo de situaciones, la gente es indiferente, lo aceptan y ya esta, piensan que es el destino y que es lo normal. Tras una de estos sucesos comprendes que estabas equivocado y debido a la incertidumbre te ciegas y dejas de creer en todo lo que pensabas con anterioridad, como que es injusto, que Dios no querría que la persona se fuese, que no querría que tu sufrieses y que esa persona no estará mejor muerta, estaría mejor en este mundo, al lado de su familia, junto a ti... Te preguntas si el destino existe y si es así por qué el destino de esta persona era morir, por qué él o ella si no ha hecho nada malo. Las personas humanas no estamos preparadas para afrontar este tipo de noticias y superar el dolor que sientes al perder a alguien.
En resumen, la muerte es algo inevitable, que duele pero según tus creencias puedes superarlo,  pensar que habrá algo después que les lleve a una vida mejor y que murieron por algo, que murieron y gracias a ello las cosas son como son. Es el fin de la vida pero el principio de algo distinto y mejor. No debemos temerlo.
Por último, añado una frase de un filósofo conocido, San Agustín: La muerte no es nada, sólo he pasado a la habitación de al lado.  Esta frase, ayuda a comprender que aunque se te muera un ser querido, en algún momento te reunirás con él/ella.

La frase de la izquierda representa lo que he explicado anteriormente, una persona no muere si es recordada. La frase de la derecha dice que la vida es bella pero es una mentira ya que finalmente llegas a la realidad que es triste y dolorosa, la muerte.

7 comentarios:

  1. Sobre la presentación y ortografía:
    - Deberías justificar el margen izquierdo
    - Hay algunas erratas tipo: "personas de tu al rededor"
    - Faltan algunas tildes: "lo aceptan y ya esta"

    Sobre el contenido:
    - Hay un prejuicio expresado en esta afirmación sobre los no creyentes: "Estas personas suelen vivir atormentadas y frustradas ya que en general no suelen encontrar explicaciones racionales a estas preguntas". Esto no es verdad. Hay muchas personas que encuentras explicaciones racionales a muchas preguntas que les valen para vivir. Si afirmas esto tienes que argumentarlo, no puedes hacer este ataque gratis jejeje. De hecho ni Platón, ni Aristóteles, ni Sócrates eran creyentes y no eran unos amargados porque "casualmente" le daban respuestas racionales a las preguntas vitales...

    - En el cuerpo de la disertación solamente has citado a dos filósofos y de pasada, no los usas para argumentar tus razonamientos.

    - Hay una incorrección en San Agustín. Para él el alma NO ES ETERNA, ya que tiene un principio, el nacimiento. Sí que es inmortal porque luego va a "la ciudad de Dios" y vive hasta el fin de los tiempos, pero no es eterna, sino inmortal. Este argumento te vendría bien para justicar mejor la postura creyente.

    - La reflexión personal muy buena, pero si hubieras cogido alguna frase de algún filósofo para terminar, hubiera sido redonda.

    ¿La mejoras?

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  2. Me ha gustado, en cambio añadiría más información sobre los filósofos nombrados.La mejor parte ha sido la reflexión personal, que comparto contigo.

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  3. Gracias Patricia por tus indicaciones, te he hecho caso y he añadido información al desarrollo acerca de los filósofos que había nombrado. Por otro lado, al igual que tu, pienso que si se te acaba de morir alguien, es difícil ponerse a pensar en respuestas racionales, con el tiempo aprendes a aceptarlo y comienzas a penar en lo mismo que pensabas anteriormente, comprendes que la vida es sólo el camino hacia Dios y que si esa persona nos ha dejado, es porque ha terminado su misión en la Tierra

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  4. Tu disertación me ha parecido muy concisa e interesante. Me ha gustado mucho tu reflexión, sobre todo la parte en la que dices: "No mueres hasta que no desapareces de los recuerdos de la gente. No falleces del todo hasta que no te olvidan."

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    1. Coincido contigo, como he escrito en mi disertación, la gente no muere del todo si no la olvidan, si se acuerdan de él o ella en los momentos felices, o le recuerdan en algún momento del día, esa persona siempre estará presente en las vidas de la gente que le quería

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  5. He leído tu disertación, y estoy totalmente de acuerdo con todo el contenido, y en concreto me ha gustado ennpaeticular la frase final "la bella mentira y el triste engaño". A mi parecer, la muerte ni es triste ni es un engaño, pero es una bonita reflexión que michos deberían conocer

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    1. A mi parecer, tampoco estoy completamente de acuerdo con esa frase ya que creo que la muerte es una triste realidad pero pienso que la vida no es una mentira, considero que es la vida la que nos hace sentirnos bien y por tanto no es mentira, es real.

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